Mahdi, The Canadian Master of Magic That Knows No Barriers
The Color of Magic in the Science Park
Four magicians and 470 girls were the protagonists of a gala that had the collaboration of Aldeas Infantiles.
Jose Antonio Munoz
Mahdi Gilbert, de Canada, una muestra de que la magia no entiende de barreras.
GRANADA. The Science Park Auditorium was dressed in colors yesterday. In the stalls, uniform color of the schools that occupied it. In total, 470 students from nine different centers. On stage, the color of the magicians who filled him: Juanma Guillo, Magomigue, Mahdi Gilbert and Gozalo Albiñana. Guillo, from Madrid, opened fire starring in a number where he wisely mixed magic and humor. His 'victim', Alejandro, a nine-year-old student at the Vicente Alexandre school, was amused and worried in equal parts by a mischievous magic hat. The music of 'Mission Impossible' animated games in which both teachers and students participated. Laughter and applause crowned the appearance of Guillo, who could not quite remember the magic words to say goodbye, which were none other than... Hocus Pocus.
Yesterday's gala had a special flavor, due to the involvement of Aldeas Infantiles. Javier Vigil, territorial director, recalled that after 16 years of collaboration and six developing this appointment with the schools, the balance is more than positive. <<Not only is Migue's involvement to be praised. The fact that the children we have in our protection and prevention programs can invite their classmates is something very nice>>. Currently, there are 58 boys and girls in foster care, and 120 who attend their day center.
No Limits
One of the highlights of the gala was the appearance of Mahdi Gilbert, from Canada, a magician who has no hands or legs, and has had to adapt to the circumstances to make his dream come true. An example of self-improvement, which caused an expectant silence among the audience when Magomigue introduced him. Silence that, at his request for volunteers, was quickly altered. To the difficulty of realizing the illusions, was added, then, that of making easy what a priori could be difficult. And he achieved it. Beyond the improbable, beyond the impossible. Card tricks where they got out of hand and were picked up at will, inexplicable disappearances... Mahdi claimed the power of union, of communication, of working together. With this panorama, asking the schoolboys if they wanted more magic was something idle. Of course they wanted. A parable arrived about the union of the races, using the separation and subsequent union of black and red cards. Crossed hands to symbolize the closeness that an absolutely unique artist exudes. In addition, Magomigue was the perfect link between some artists and others. His mastery of the scene remains prodigious.
And finally, Gonzalo Albiñana, from La Mancha, showed his peculiar vision of personal finances and how holes in pockets are capable of changing a life. Jokes with a certain component of naive eschatology, the 'caca culo pedo muco pes', which delighted the children, was topped off with shadow puppets and the entire fauna with circus music in the background. <<How handsome>>, said the little ones, who couldn't decide whether they saw a cow or a bull, but they saw horns. An authentic delight, that neither children nor adults will forget. A very magical morning.
Magia de colores en el Parque de las Ciencias
Cuatro magos y 470 niñas fueron los protagonistas de una gala que contó con la colaboración de Aldeas Infantiles
José Antonio Muñoz
GRANADA. El Auditorio del Parque de las Ciencias estaba ayer vestido de colores. En el patio de butacas, color uniforme de los colegios que lo ocupaban. En total, 470 alumnos de nueve centros distintos. En el escenario, el color de los magos que le llenaron: Juanma Guillo, Magomigue, Mahdi Gilbert y Gozalo Albiñana. Guillo, madrileño, abrió fuego protagonizando un número donde mezcló sabiamente magia y humor. Su 'victima', Alejandro, alumno de neuve años del colegio Vicente Alexandre, se divirtió y preocupó a partes iguales por culpa de un travieso gorro mágico. La música de 'Misión imposible' animaba juegos en los que participaban tanto profesores como estudiantes. Risas y aplausos coronaron la aparición de Guillo, quien no terminaba de recordar las palabras mágicas con que despedirse, que no eran otras que... Hocus Pocus.
La gala de ayer tenía un sabor especial, por la implicación de Aldeas Infantiles. Javier Vigil, director territorial, recordó que tras 16 años de colaboración y seis desarrollando esta cita con los colegios, el balance es más que positivo. <<No sólo es de alabar la implicación de Migue. El hecho de que los niños que tenemos en nuestros programas de protección y de prevención puedan invitar a sus compañeros es algo muy bonito>>. En la actualidad, 58 son los chicos y chicas en acogida, y 120 los que acuden a su centro de día.
Sin límites
Uno de los momentos álgidos de la gala fue la aparición de Mahdi Gilbert, de Canadá un mago que no tiene manos ni piernas, y se ha tenido que adaptar a las circunstancias para hacer realidad su gran ilusión. Todo un ejemplo de superación, que suscitó un expectante silencio entre la concurrencia cuando Magomigue le presentó. Silencio que, ante su petición de voluntarios, se alteró rápidiamente. A la dificultad de realizar las ilusiones, se unía, pues, la de hacer fácil lo que a priori podía resultar difícil. Y lo logró. Más allá de lo improbable, más allá de lo imposible. Juegos de cartas donde estas se desmadraban y recognían a voluntad, despariciones inexplicables... Gilbert reivindicó el poder de la unión, de la comunicación, del trabajo en común. Con este panorama, preguntar a los colegiales si querían más magia era algo ocioso. Por supuesto que querían. Llegó una parábola sobre la unión de las razas, usando la separación y posterior unión de cartas negras y rojas. Manos cruzadas para simbolizar la cercanía que desprende un artista absolutamente único. Además, Magomigue fue el perfecto nexo de unión entre unos artistas y otros. Su dominio de la escena sigue siendo prodigioso.
Y para finalizar, Gonzalo Albiñana, manchego, mostró su peculiar visión sobre las finanzas personales y de cómo los agujeros en los bolsillos son capaces de modificar una vida. Bromas con cierto componente de escatología ingenua, el 'caca culo pedo moco pis', que hizo las delicias de los niños, fue rematado con sombras chinescas y la fauna al completo con una música circense de fondo. <<Qué guapo>>, decían los pequeños, que no se decidían sobre si veían vaca o toro, pero veían cuernos. Una autentica delicia, que ni los niños no los mayores olvidarán. Una mañana muy mágica.
